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lunes, 6 de febrero de 2012

¿Qué me puedo poner?


Carolina Herrera, Oscar de la Renta, Christian Lacroix,Victorio y Luchino... no me importaria entrar en una iglesia si llevara uno de esos puesto. Eso si, sin celebración posterior porque me gastaría todo el presupuesto en el traje de novia. O quizás me conformaria con cualquier cosa siempre que mis pies fuesen sobre unos Manolo Blahnik como los de Carrie Bradshaw en Sex at the city la película, aunque mis favoritos son esas merceditas  que la protagonista de Sexo en nueva York se prueba en Vogue (yo también me las pondría si no fueran mi número). ¿Qué me puedo poner? esa es la eterna pregunta. Agamos un repaso por mis vestidos, zapatos y complementos favoritos:


Mi favorito es el vestido verde que Keira Knightley llevaba en Expiación. Este magnífico vestido fue un diseño que los productores de la película encargaron especialmente a Jacqueline Durran y ya es considerado como una pieza única de la historia del cine junto al vestido negro que lució Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes o el blanco vaporoso que vistió a Marilyn Monroe en La tentación vive arriba. Se trata de un sofisticado vestido de noche en seda verde esmeralda con cortes irregulares y un pliegue a la altura de la cadera combinado con unas sandalias doradas y joyas art decó tanto en el brazalete de motivos geométricos como en los adornos del pelo. Un diseño bellísimo y espectacular que consiguió conquistar a Robbie Turner (el personaje interpretado por James McAvoy en la película).

También es importante cubrir adecuadamente los pies así que, tengo que hacer referencia al mejor en el tema, Manolo Blahnik, ahora el triple de famoso gracias al personaje de Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York. Los manolos son tan chics que hasta alguna ha llegado a cortarse el dedo meñique para calzarselos. Mis favoritos, los zapatos de boda de Carrie en la peli de Sexo en Nueva York (izquierda), las merceditas (centro) que salen en la serie y unas preciosas sandalias de la temporada primavera verano de 2009 (derecha):


Pero como los manolos no son asequibles, yo prefiero usar zapatillas. Hubo un tiempo en que me dió por compra sólo bambas, por lo que las he tenido de varios colores y estilos, aunque mis favoritas son de color rosa fucsia (aunque las negras pegan con todo). Las más caras, pero la marca que más variedad de modelos tiene en el mercado son las All Star (desde 60 euros), si las quieres más asequibles puedes optar por unas Jhon Smith o acercarte a cualquier tienda de deporte o, finalmente, si tu presupuesto es menor de 10 euros siempre puedes encontrarlas en Carrefour o en el bazar chino de tu barrio.

Unos de mis accesorios favoritos son los colgantes largos con varios adornos (últimamente me ha dado por ellos), pero mi favorito es una llave en forma de corazón que compre en H&M. El corazón se abre, lleva un imán por dentro que permite cerrarlo y en él se puede guardar lo que quieras (siempre que sea muy pequeño). Otro complemento que no falta en mi joyero y que llevo puesto a menudo es un "llamador de ángel". Para los que no conozcan este tipo de colgante es una esfera que contiene un cascabel dentro (de ahí el nombre) y que da suerte siempre que te la regale alguien. El mío es de plata y se puede abrir para ver la bolita verde que lleva dentro.

Otra cosa que nunca olvido son un par de complementos ochenteros como las chapas, de todos los colores, estilos y tamaños. Son estupendas para decorar tus camisetas, chaquetas, bolsos e incluso los pantalones, no está mál llevar alguna en uno de tus bolsillos. Y por último, las gafas de pasta, aunque tengo unas muy monas estilo aviador, lo que más se lleva ahora es la típica gafa negra de pasta.




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